La película número 100 de la serie Gold de Private fue una versión X de los juegos olímpicos con unas pruebas muy originales y estimulantes. Narrada a través de un informativo presentado por Sai-Tai Tigre que nos va introduciendo a las diferentes pruebas, Pornolympics reunió a más de 20 actrices es un conjunto de escenas de alto voltaje sin desperdicio. Black Angelika, Dorina Golden, Jasmine Rouge, Jenny Baby, Lucy Belle, Misty Mild, Sai-Tai Tiger, Sandra Black, Simony Diamond, Tea Blondie, Terri Summers y Verónica Sánchez, entre otras, conforman el espléndido reparto de esta divertida obra de la factoría sueca.

La escultural Britney (la chica de la portada) comienza el espectáculo junto a Zenza Raggi en la piscina en una escena introductoria previa al inicio de los juegos. Más tarde, el canario Andrea Moranty introduce una pelea de barro de Stella Delcroix y Terri Summers para después unirse a ellas en un sucio trío. Después, Alex Forte, Antonio Ross, Cherry Jul, Lulu, Misty Mild, Thomas Stone, Titus Steel y Verónica Sánchez se lo montan junto a la piscina tras una dura prueba de las chicas consistente en nadar dos largos parando en una punta a chupársela a sus parejas. En la siguiente prueba, que comienza con una carrera de las chicas en bicicleta con un gran consolador en el sillín, Bob Terminator, Grinch, Jasmine Rouge, Kevin King, Sandra Black, Sera Pasión y Simony Diamond disfrutan de una buena orgía.

Tras la extasiante maratón con gincana de orales masculinos y femeninos, Black Angelika, Caty Cambel, Lucy Belle, Natalie Colt, Nick Lang y Ricardo Bell se montan otra orgía en la playa. La última prueba es, directamente, de follar, con unas cuantas parejas (entre los que encontramos a Adrianne Rouso, Dorina Golden, Gina Blonde, Honey Winter, Jenny Baby y Lea Lexus, entre otros) sobre la pista de gimnasia cambiando de postura a ritmo de los silbatos de los árbitros. Y para terminar, la presentadora del informativo que nos iba introduciendo las diferentes pruebas (Sai-Tai Tigre), recibe en su cara las corridas de los cámaras y el resto del equipo de televisión, cachondos tras la emisión. Es difícil decidirse por alguna escena, pero salvo el trío en el barro (algo desagradable para mí) el resto de las escenas no tienen desperdicio.

Aunque se podían haber lanzado más con pruebas más extravagantes y divertidas (aunque, en general, estaban muy bien), Private encuentra una buena excusa (y bien planteada y realizada) para montar un buen número de escenas sexuales con humor, mucha diversión y ganas de sexo. Se trata de una buena muestra de que no hace falta un gran argumento para realizar una película que, además de buen sexo, ofrezca un valor añadido al espectador.

Lo mejor: Britney, el enorme reparto femenino y las escenas grupales

Lo peor: el trío en el barro