Siempre he admirado a Francois Clousot como director de fotografía. Sus trabajos para Wicked Pictures siempre han sido admirables en ese campo. Por eso, cuando vi, el año pasado, que había dirigido una película y que, además, esta trataba de viajes en el tiempo (mi subgénero favorito de la ciencia ficción) no pude resistirme. El reparto también era halagüeño. Randy Spears como protagonista y, acompañándole, Julia Ann, Brooke Banner, Kirsten Price, Mindy Main, Tommy Gunn, Barrett Blade y Eric Masterson. Pero las cosas nunca son lo que parecen.

Alan (Randy Spears) es un científico al borde de uno de los descubrimientos más importantes de la historia: la manera de viajar en el tiempo. Poco antes de tenerlo todo listo para realizar la prueba definitiva, su mujer Sarah (Julia Ann) muere en un accidente de tráfico. Hundido en su depresión, utilizará su invento para viajar al pasado y evitar que Sarah muera.


El argumento es sospechosamente familiar. Sin embargo, se le podría dar una oportunidad, porque las cosas no son como parecen, sino como se materializan. Sin embargo, Clousot falla estrepitosamente en este trabajo. La fotografía es buena, pero falla en todo lo demás. En la dirección, no vemos nada nuevo. Eficiente, pero nada más, Clousot no arriesga, no experimenta y no nos transmite nada tras las cámaras. Pero lo peor no es eso, sino que el gran fallo de esta película es el guión: facilón, algo aburrido, previsible, ñoño y sin ningún aporte. Cloustot se limita a mostrarnos lo que ya esperamos desde el principio y lo hace de la forma más sosa posible. En el terreno interpretativo, Todos están bastante bien, pero sin lucirse, algo debido, obviamente, a un guión sin fuste.



Sexualmente, la cinta no obtiene malos resultados, aunque no aporta nada significativo, siendo, una vez más, una colección de cinco escenas de parejas más que tradicionales. Randy con su mujer Julia Ann, Blade con Brooke Banner en el bar, Julia con Tommy Gunn, Randy con Mindy Main y, finalmente, Kirsten Price y Eric Masterson. Ninguna destaca por en cima de la otra, pero yo me quedo con la de Mindi, me alegra ver caras (y otras partes del cuerpo) nuevas.

En resumen (sí, ya sé, una crítica corta para ser yo, pero no vale la pena decir más), un filme fallido y decepcionante que me empuja a animar a Clousot a que siga con su labor de director de fotografía, pero que deje apartadas sus facetas de director y guionista.


Lo mejor: Que Julia Ann sigue siendo atractiva y buena actriz (aunque me gusta más cuando hace de mala)


Lo peor: El guión